Comienzos...

Septiembre 2012: en la empresa anuncian la celebración en Vitoria de la "Carrera de Empresas", no sé porqué pero me apunto, a pesar de no haber corrido más de 3 kms. seguidos casi nunca, la carrera es de 5km. y supone un reto.

Me apunto con dos compañeras de trabajo que dicen hacer poco running, ritmo esperado 5'30". Yo estaba en ese momento por encima de 6'.

Voy cogiendo ritmillo y cierto vicio con el asunto, así que voy aumentando las salidas, el ritmo y la distancia.

Consigo terminar la carrera muy bien, empezando cansado al final con buenas sensaciones, incluso me tomo el lujo de esprintar. Tiempo: 27'53".

Diciembre 2012:
El vicio sigue adelante, así que me apunto a la San Silvestre: 7km, otro reto importante. Sigo incrementando tiempos de entrenamiento, ritmos, pero a unas semanas de la carrera comienza un molesto dolor en la parte exterior de la rodilla. Más tarde sabría que es el síndrome de la cintilla iliotibial, o tendinitis del tensor de la fascia lata.


aquí al acabar la San Silvestre

Acabo la carrera con dolor aunque satisfecho (unos 42', la afluencia de corredores fue espectacular y casi no se podía correr), como el dolor no remite me lo miro, tengo fascitis plantar. Un mes de rehabilitación, y como me encuentro mejor salgo a probar. 3 km. y a parar por el dolor intenso en la rodilla: resulta que no se cura sola. Añadimos el diagnóstico a la rehabilitación. Otro mes parado.

26 de febrero: me infiltran el trocánter (donde comienza la fascia lata). Cruzo los dedos, todavía mantengo esperanzas de poder hacer los 10km. de Laredo a los que me he apuntado hace como un mes en un arranque de entusiasmo.

Desde aquí seguiré mi crónica particular...

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